el martillo con el juguete
la risa con el sonido del mar
el pito con el celibato
el deseo con el sexo
mi voz con la que sale del otro lado del teléfono
lo cursi con mi-amor
El problema de las comparaciones es que uno, por lo general, se siente obligado a elegir. Una vez escuché a una señora decirle a su hija de siete años: "elegir siempre es resignar algo". El martillo o el juguete.
Las cosas deberían tener más gris.
5 comentarios:
Clari! tanto tiempo...
y tus palabras siguen teniendo el mismo gusto a poesia de siempre...
elegir algo, es resignar algo...
ojala no fuera así, pero así es...
¿porque será que algunos sentimientos no tienen gris?
Hola Clarisa, yo también te extrañé!!! Coincido con vos y también con Coni, el arco iris de colores no siempre es como lo vemos en el cielo.
No te pierdas. Besitos. Sandra
imaginate
el arte de combinar los sonidos
y los silencios
con mas sonidos
y mas palabras
- Aveces, algunas, existen los grises, yo algunas otras prefiero los colores, aunque entre ellos venga colgado un gris.
Tipificamos y comparamos en un intento por entender. Y con este burdo intento, cegamos posibilidades. Todos los matices estan ahi, esperando que nos decidamos descubrirlos.
Publicar un comentario