lunes, 21 de mayo de 2007

Postre

Y la cena llegó a su fin.
-Dónde está mi saco?-
No quiero irme del perchero. Finjo buscarlo
entre tu bufanda tu cuello. Me preguntás si verde manzana convina.
-Sí-
Subís
a máximo la estufa para desnudarnos la noche y dormir.
A la mañana busco las medias,
ahora no hay luz
entre las sábanas. Se sienten caer cáscaras a gajos,
como suaves frutas
pegoteadas.

1 comentario:

Anónimo dijo...

lindo blog. lo sensual en tu palabra en tu cuerpo, en tus piernas me hace recordar a la historia del ojo
te mando un beso y pronto hablémos
te leo